Artículo de la Biblioteca Virtual de Pensamiento Político Saavedra Fajardo
SAN JULIÁN DE TOLEDO
«Figura señera de la iglesia visigoda, sólo comparable con San Isidoro de Sevilla, a quien cede el puesto en la comprensión enciclopédica del saber, pero a quien aventaja en vigor personal y originalidad, fue San Julián de Toledo» (J. Madoz El símbolo del Concilio..., p. 99). Es muy poco lo que sabemos de sus primeros años; su nacimiento puede fecharse hacia el año 642 en Toledo, y en cuanto a su origen se ha conjeturado que fuera judío, sin que haya serias razones para tal suposición. En cambio, consta por propio testimonio que ingresó en la escuela catedralicia de aquella ciudad educándose junto a San Eugenio y San Ildefonso. Tenemos también noticias a través de Félix, su biógrafo, de que intentó abrazar la vida monástica sin que llegara a lograrlo a causa de «graves dificultades» que hoy ignoramos cuáles pudieran ser. En el 680 fue consagrado obispo de Toledo y como tal presidió los concilios XII (681), XIII (683), XIV (684) y XV, de extraordinaria importancia, sobre todo este último, reunido en mayo del 688, por las consecuencias que pudo tener para la evolución posterior de la Iglesia española.
Una vez clausurado el concilio de Constantinopla, reunido en el 680 para juzgar la herejía de los monotelitas, el Papa León II envió, entre otros al metropolitano de Toledo, las conclusiones allí adoptadas para su ratificación. Éstas llegaron en el invierno del 683, recién acabado el concilio XIII de aquella ciudad, y San Julián, que no estimó oportuno por lo riguroso de la estación, convocar un nuevo concilio, redactó un Apologético que remitió a Benedicto II, sucesor de León II. Éste creyó procedente pedir una aclaración acerca de ciertas expresiones contenidas en el texto, y así se lo hizo saber al metropolitano de Toledo por medio de un emisario. Entretanto se había reunido el concilio XIV toledano, que había aprobado el documento redactado por San Julián y éste, que era de temperamento fogoso, oídas las amonestaciones del Papa, escribió un nuevo Apologético reafirmándose en sus conclusiones y manifestando su firme decisión de mantenerlas a ultranza. El Apologético contenía, además, expresiones mordaces e irreverentes para sus contradictores, e incluso los amenazaba con las sanciones del concilio caIcedonense. Luego convocó un nuevo concilio, el XV, y, tras de recibir la unánime aprobación de los Padres en él reunidos, remitió el documento a Roma. Empero, Benedicto II, convencido de la santidad de la doctrina mantenida por la Iglesia española, no sólo no se molestó por los términos de este segundo Apologético, sino que felicitó a San Julián y a los demás Padres conciliares por su ortodoxia y su valentía en mantenerla.
Tales fueron, en síntesis. los hechos relativos a aquel concilio que tantas controversias ha suscitado y en el que se ha querido ver, incluso, un principio de cisma, llegándose a afirmar que de no haber sido por la invasión musulmana, acaecida años más tarde, hubiera conducido a una ruptura de la Iglesia española con la de Roma (P. B. Gams Die Kirchengeschichte..., Vol. II, 2.ª parte, p. 237 y s.).
San Julián moría poco despues de aquellos sucesos, a principios de marzo del 690, antes de que se hubieran extinguido las últimas consecuencias de aquella polémica que llegaría hasta el concilio XVI reunido el 693. Su fiesta se celebra el 8 de dicho mes.
El pensamiento de San Julián gravita en torno al hombre en su dimensión temporal. Ya en el Liber historiae de eo quo Wambae... manifiesta sus especiales dotes de historiador al narrar los hechos en un estilo directo y animado, bien diverso del propio de las crónicas, y lleno de observaciones y reflexiones personales, como ya había hecho San Isidoro. Pero San Julián es, sobre todo, un filósofo y un teólogo, por lo que su interés por la temporalidad del hombre se mueve en un nivel especulativo superior a lo puramente histórico, y aún dentro del ámbito de la filosofía de la historia, su preocupación teológica se centra en torno a las «postrimerías» humanas, culminando así su pensamiento en una concepción escatológica, en la que radica su verdadera originalidad. Dos obras son las más significativas al respecto:
De sextae aetatis comprobatione es una obra de carácter apologético, concebida para defender la divinidad de Jesucristo frente a los judíos, pero que contiene, además, un esbozo de filosofía de la historia. Dedicada al rey Ervigio, está compuesta de tres libros, consagrado el primero a defender la venida del Mesías con textos del Antiguo Testamento, en especial de Daniel, Miqueas y Malaquías y el segundo, con pasajes de los Evangelios y. demás libros del Nuevo Testamento; pero es en el tercero donde expone la doctrina que ahora nos interesa. Según San Julián la existencia del género humano no se computa por años, sino por generaciones. Estas son, a partir de la creación, seis: La primera abarca de Adán a Noé, la segunda de Noé a Abraham, la tercera de éste a David, la cuarta hasta la cautividad de Babilonia, la quinta desde aquélla hasta Cristo y la sexta desde Cristo a nuestros días. Sin embargo, tal división, por lo menos en sus rasgos fundamentales, está tomada de San Isidoro.
Prognosticon futuri saeculi es el escrito que contiene lo más original de su pensamiento, a saber, la doctrina escatológica. La ocasión inmediata de la obra fueron unas conversaciones tenidas con Idalio, obispo de Barcelona, durante la celebración del XV concilio de Toledo y consta de tres libros, dedicado el primero a la muerte, el segundo al estado en que se hallan las almas antes de la resurrección de los cuerpos, y el tercero a la resurrección.
Las almas no mueren con el cuerpo, sino que continúan viviendo, aunque no en un estado de indiferencia, sino felices o condenadas, de acuerdo con un veredicto o juicio particular. Las almas de los justos antes de la resurrección de los cuerpos no gozan de la visión directa de Dios, «facie ad faciem» (Antikeimenon, PL, vol. 96, col. 606), sino que, siguiendo a San Agustín, San Julián las sitúa en el tercer cielo, donde el disfrute de Dios es puramente espiritual; después de la resurrección, como siglos más tarde para Santo Tomás, su felicidad consistirá en el conocimiento ilimitado de la esencia divina: «Nullo modo credendum est quia sit aliquod quod ignoret» (Prognosticon, PL, vol. 96, col. 492).
El juicio final será precedido por algunas señales -venida de Elías, aparición del Anticristo, conversión del pueblo judío, cataclismos naturales- y estará presidido por Jesucristo, del que los réprobos sólo verán su humanidad, mientras que los justos contemplarán también su divinidad. En cuanto a su duración y lugar de celebración, nada se sabe. Tras él vendrá un fuego destructor que aniquilará el universo, mas sin afectar a los justos, bien sea porque se hallen por encima de él o porque sus propiedades gloriosas los hagan inmunes. En el infierno, que San Julián parece situar en el interior de la tierra, los condenados sufrirán eternamente, además de la ausencia de Dios, penas físicas consistentes en el fuego. También afirma la existencia del purgatorio para las almas de los justos que aún precisen de purificación, aunque su existencia concluirá con el juicio final.
Pero San Julián fue antes que fecundo escritor, un apasionado bibliófilo, que incorporó a la biblioteca de la catedral toledana cuantos códices pudo conseguir y que él se cuidó personalmente de corregir y completar. San Agustín, San Gregorio Magno, Orígenes, San Isidoro, Hilarío de Poitiers, Tertuliano, Eusebio de Cesarea ... fueron sus autores preferidos, de los que sacó aquellos exempla, tan del gusto de los coetáneos, para enriquecer una obra por lo demás tan original como cincuenta años antes lo había sido la de su maestro el obispo de Sevilla.
OBRAS
1 Antikeimenon, hoc est contrapositorum sive contrariorum in speciem utriusque Testamenti locorum. Libri duo, En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 139-265., De dudosa identificación.
2 Antikeimenon, hoc est contrapositorum sive contrariorum in speciem utriusque Testamenti locorum. Libri duo, En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, vol. 96, coIs. 586-706., De dudosa identificación.
3 Appendix operum suppositorum Sancto Iuliano. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 387-390., Obra apócrifa.
4 Chronica regum wisigotthorum. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 385 y s., Obra apócrifa.
5 Chronica regum wisigotthorum. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, vol. 96, coIs. 809-816., Obra apócrifa.
6 De comprobatione aetatis sextae. Libri tres. Precedida de una Oratio ad Deum ante libros de comprobatione sextae aetatis y de una Epistola ad Ervigium regem in libris de comprobatione. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 88-139.
7 De comprobatione aetatis sextae. Libri tres. Precedida de una Oratio ad Deum ante libros de comprobatione sextae aetatis y de una Epistola ad Ervigium regem in libris de comprobatione. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, vol. 96, coIs. 537-586.
8 De remediis blasphemiae cum epistola ad Adrianum abbatem. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, Vol. 96, coIs. 1379-1386., De dudosa identificación.
9 De tribus capitulis. Liber Apologeticus. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 77-87.
10 De tribus capitulis. Liber Apologeticus. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, vol. 96, cols. 525-536.
11 Excerpta de libris S. Augustini. Obra perdida.
12 Historia rebelionis Pauli adversus Wambam Gothorum regem. En: FLÓREZ DE SETIÉN Y HUIDOBRO , E. España Sagrada. Madrid, por varios impresores, 1747-1879, Vol. VI, p. 529-563.
13 Historia rebelionis Pauli adversus Wambam Gothorum regem. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 327-383.
14 Historia rebelionis Pauli adversus Wambam Gothorum regem. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, Vol. 96, cols. 759-808.
15 Idalii Barcinonensis epistolae duae. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 3-10., Obra apócrifa.
16 Idalii Barcinonensis epistolae duae. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, Vol. 96, coIs. 815-818., Obra apócrifa.
17 Libellus de divinis judiciis. Obra perdida.
18 Liber Apologeticus. Véase: García Villada, Z. Historia eclesiástica de España. Madrid: Compañía Iberoamericana de Publicaciones, 1929-1936, Vol. II, cap. 1, p. 333 y s., De dudosa identificación.
19 Liber carminum diversorum. Obra perdida.
20 Liber missarum. Obra perdida.
21 Liber sermonum. Obra perdida.
22 Orationes a S. Iuliano compositae, quaequae in Missali Mozarabico reperiuntur. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 326 y s., De dudosa identificación.
23 Prognosticon futuri saeculi. Libri tres. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 3-76.
24 Prognosticon futuri saeculi. Libri tres. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, vol. 96, cols. 453-524.
25 Sancti Hildefonsi vita. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. 322-325.
26 Sancti Hildefonsi vita. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, Vol. 96, coIs. 757-760.
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19 HILLGART, J. N. El «Prognosticon futuri saeculi» de S. Julián de Toledo. Analecta Sacra Tarraconensia, Barcelona, 1957, 30, p. 1-57.
20 HILLGART, J. N. Las fuentes de S. Julián de Toledo. Anales Toledanos, 1971, 3, p. 97118.
21 HILLGART, J. N. Sancti Juliani Toletane Sedis episcopi opera omnia. En Corpus Christianorum. [Tournholt, 1976], Part 1, p. 115-125.
22 HILLGART, J. N. St. Julian of Toledo in the Middle Ages. Joumal of the Warburg an Courtauld Institutes, Londres, 1958, 21, p. 7-26.
23 HILLGART, J. N. Towards a critical edition of the works of St. Julian of Toledo. Studia Patristica, 1957, 1, p. 37-43.
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25 MADOZ, J. El Símbolo del Concilio XVI de Toledo. Madrid: Facultad de Teología y de Filosofía del Colegio Máximo de Oña, S. I. Oña, 1946, p. 98-107.
26 MADOZ, J. Fuentes teológico-literarias de sextae aetatis libri tres» de S. Julián de Toledo. Estudios eclesiásticos, 1952, 100, p. 39-69.
27 MADOZ, J. Fuentes teológico-literarias de sextae aetatis libri tres» de S. Julián de Toledo. Helmántica, 1967, 18, p. 297340.
28 MENÉNDEZ PELAYO, M. Historia de las ideas estéticas en España. Santander: C.S.I.C., 1946-1947, passim.
29 MIRANDA CALVO, J. S. Julián, cronista de guerra. Anales Toledanos, 1971, 3, p. 159-170.
30 MURPHY, F. Julian of Toledo and the Fall of the Visigothic Kingdom in Spain. Speculum, Massachussets (EE.UU.), 1952, 27, p. 1-27.
31 MURPHY, F. Julian of Toledo, and the condemnation of Monothelism. En Mélanges Joseph de Ghellinck. Gembloux, 1951, Vol. I, p. 361-373.
32 POZO, C. La doctrina escatológica del «Prognosticon futuri saeculi» de San Julián de Toledo. Estudios eclesiásticos, 1970, 45, p. 173-201.
33 RIVERA, J. F. Giuliano di Toledo. En Bibliotheca Sanctorum. [s.l.: s.n., s.a.], Vol. VI, p. 1216-1218.
34 RIVERA, J. F. San Julián, arzobispo de Toledo. En Año cristiano. Madrid: BAC, 1959, Vol. IV, p. 536-541.
35 RIVERA, J. F. San Julián, arzobispo de Toledo. Barcelona: Amaltea, 1944. 240 p.
36 ROBLES SIERRA, A. Fuentes del « antikeimenon» de Julián de Toledo. Escritos del Vedat, Valencia, 1971, 1, p. 59-135.
37 ROBLES SIERRA, A. Prolegómenos a la edición crítica del «Antikeimenon» de Julián de Toledo. Analecta Sacra Tarraconensia, 1969, 42, p. 111-142.
38 SÁINZ RODRÍGUEZ, P. Antología de la literatura espiritual española. l. Edad Media. Madrid-Salamanca: Fundación Universitaria Española y Universidad Pontificia, 1980, p. 269-286.
39 Sanctus Julianus toletanus episcopus necnon ldalius et Felix Barcinonensis et Toletanus episcopi. Notitia historica. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, vol. 96, cols. 427-444.
40 VEIGA BALIÑAS, A. La doctrina escatológica de San Julián de Toledo. Tesis presentada para el doctorado en el curso académico 1938-1939. Comillas: Universidad, 1940, XI, 156 p.
41 VERA, F., La cultura española medieval. Datos bio-bibliográficos para su historia. Madrid: Victoriano Suárez, 19331934, Vol. II, p. 41 y s.
42 VIDART, L. La filosofía española. Madrid: Imprenta A. Europa, 1866, p. 18 y s.
43 Vita seu elogium, auctore Felice Toletano etiam episcopo. En: MIGNE, J. P. (Patrología latina) Patrologia... Bibliotheca universalis... omnium sanctorum Patrum... París, 1844-1864, vol. 96, cols. 445-452.
44 Vita seu elogium, auctore Felice Toletano etiam episcopo. En: Lorenzana, F. Collectio SS. Patrum Ecclesiae Toletanae. Madrid: Ibarra, 1782-1793, Vol. II, p. XV-XXII.
45 WENGEN, P. Julianus Erzbischof von Toledo. Sein Leben und seine Wirksamkeit, unter den Königen Ervig und Egica. St. Gallen, 1894.
46 WICKI, N. Das «Prognosticon futuri saeculi» Julianis von Toledo als Quellenwerk der Sentenzen des Petrus Lombardus. Divus Thomas, 1953, 31, p. 345-360.
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